La casa familiar del insigne ajedrecista Ruy López ya tiene su placa en la Plaza Grande

Este lunes 13 de enero se ha celebrado el acto de inauguración de la placa de la vivienda que perteneció a la familia López de Segura, del insigne campeón de ajedrez zafrense Ruy López. El acto se ha llevado a cabo en la Plaza Grande, ubicación real del domicilio familiar y ha sido descubierta por los responsables de este proyecto de investigación, los hermanos Gragera Ledesma, Daniel y Francisco de Asís, Antonio Bizarro y el alcalde de Zafra, Juan Carlos Fernández.

Además, han estado presentes los cronistas locales, José María Moreno y Juan Carlos Rubio, miembros de la Agrupación de Ajedrez Ruy López, del Centro de Iniciativas Turísticas (CIT), guías turísticos y familiares de Antonio Osuna, investigador y estudioso de la figura del afamado ajedrecista, y el concejal de Deportes, Javier Domingo Jaramillo, entre otros.

Para la agrupación de ajedrez ha sido un día muy especial, ha destacado Daniel Gragera, que ha abierto el acto agradeciendo a todas las personas y entidades que han hecho posible esta labor de investigación y la sustitución de la antigua placa, que estaba mal catalogada y ubicada en el antiguo Hospital de Convalecientes de San Ildefonso, en la calle Tetuán hace 50 años: «Casi 500 años después de su nacimiento, volvemos a ensalzar la vida y obra de Ruy López. Ha sido un proceso muy complejo y tedioso, ya que la poca documentación que había eran legajos del siglo XVI, de difícil traducción», ha resaltado.

Francisco de Asís Gragera ha explicado todos los detalles de la investigación llevada a cabo, la cual comenzó el año pasado, con el objetivo de situar correctamente la vivienda de la familia López de Segura. Tras varias consultas al archivo histórico municipal, constatando que el lugar donde estaba la placa era incorrecto, «ya que allí se estableció un antiguo hospital-iglesia, fundado por Alonso de Segura, hermano del ajedrecista», y la aportación documental de Antonio Bizarro, que comenzó esta investigación hace 30 años sin poder concluirla, fue una carta del archivo histórico municipal, de donación de los hermanos López a su hermana María, datada el 11 de agosto de 1566, la clave para desentrañar la historia. Transcrita con la ayuda de José María Moreno, ha continuado, Gragera, en ella los hermanos López donan la casa de sus padres, ya difuntos, a su hermana María como dote, situada entre las antiguas plaza Mayor y calle Frisa (actuales plazas Grande y calle Huelva), junto a viviendas colindantes de otras familias: «Con esto hacemos justicia a la historia y estaremos ligados a esta placa», ha finalizado, agradeciendo a su familia y a los colaboradores que han hecho posible esta investigación.

Por último, Juan Carlos Fernández ha indicado que esta placa es fruto del trabajo de personas con vocación histórica, a la cuales ha agradecido su labor de investigación, además de otro atractivo turístico para la ciudad.

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